El
gaseoducto Rover es un proyecto de gas natural interestatal que puede transportar 3.250 millones de pies cúbicos de gas natural diarios a los mercados del Medio Oeste, el Nordeste, la Costa Este, la Costa del Golfo y Canadá. Una vez terminado, el gaseoducto suministrará directamente a Ohio, Virginia Occidental, Míchigan y al Dawn Hub en Ontario (Canadá), que cuenta con una amplia red de puntos de distribución en el Nordeste de Estados Unidos y en el mercado canadiense. Aproximadamente el 70% del gaseoducto discurre por debajo de terreno agrícola y paralelamente a las tuberías existentes, el tendido eléctrico y las carreteras.
El gaseoducto es propiedad de Energy Transfer y está operado por esta misma empresa, mientras que el contratista Precision Pipeline se ha ocupado de otorgar el contrato para la realización de los ensayos no destructivos. Applus+, por medio de su marca comercial
JANX, ha obtenido el contrato y actuará como único proveedor para la
inspección de las soldaduras circunferenciales de las tuberías. Aunque en los últimos años los contratistas de la construcción y los operadores han mostrado una mayor disposición a conceder grandes contratos a proveedores individuales, también es cierto que hay muy pocos proveedores en Norteamérica que tengan los recursos, las capacidades y la experiencia para ejecutar este tipo de proyectos a gran escala.
Gracias a sus recursos humanos y materiales, Applus+ está bien posicionada para garantizar grandes contratos de este tipo. Además de las importantes exigencias de personal y material para un proyecto de esta magnitud, los diferentes terrenos y métodos de inspección lo convierten en un proyecto complejo desde el punto de vista operativo.
Las soldaduras se inspeccionan con nuestro sistema de ensayos
automatizados por ultrasonidos, Rotoscan. Este sistema utiliza señales acústicas, emitidas por las sondas del sistema a varios ángulos, que recorren la soldadura. Las señales acústicas reflejan cualquier imperfección presente en la soldadura y permite evaluar su integridad de forma eficaz.
Aunque el gaseoducto Rover atraviesa un terreno accidentado, haciendo difícil a veces la accesibilidad, el equipo de Applus+ consigue superar las dificultades que supone trabajar en tales condiciones gracias a su amplia experiencia. Durante la ejecución del proyecto, Applus+ desplazó a 100 empleados sobre el terreno, que trabajaron más de 200.000 horas. El proyecto combina las inspecciones de rayos X y gamma convencionales con un método avanzado de ensayos automatizados por ultrasonidos, lo que demuestra los conocimientos técnicos de la compañía en la puesta en marcha, gestión y ejecución de proyectos a gran escala.
Gracias a la estrecha colaboración y asociación con el contratista de la construcción, Applus+ pudo completar múltiples visitas previas a la realización del trabajo para evaluar el terreno y poder responder en consecuencia. Los conocimientos y las competencias del equipo resultaron clave en el asesoramiento en técnicas de inspección para contribuir a la producción de soldaduras, manteniendo al mismo tiempo la seguridad del equipo y los altos niveles de excelencia operativa.
El proyecto, por su elevada demanda de recursos y el terreno complicado donde se desarrollaba, planteaba desafíos que Applus+ superó con éxito gracias a su experiencia y la tecnología utilizada.